El encargo de venta simple es una opción flexible para vender una propiedad en España. En este artículo, repasaremos las particularidades del mandato de venta, sus ventajas e inconvenientes y los elementos esenciales que deben incluirse en un contrato de compraventa de este tipo. Al final de este artículo encontrará un modelo de encargo descargable que le ayudará a empezar.
Un encargo de venta simple es un contrato que permite al propietario de un bien confiar la venta a varios corredores, conservando al mismo tiempo la posibilidad de encontrar él mismo un comprador. A diferencia de una nota de encargo exclusivo, este tipo no limita al propietario a trabajar con un único profesional.
Esto significa que cada persona es libre de vender su propiedad directamente, sin pagar una comisión de exclusividad a los agentes inmobiliarios, siempre que ninguno de ellos haya encontrado comprador.
Estos son los elementos esenciales que debe cubrir el contrato de un encargo de venta simple.
El contrato debe incluir los datos completos de las partes implicadas: el propietario del inmueble, conocido como «el mandante», y los agentes inmobiliarios a los que ha confiado la venta. Deben especificarse los datos de contacto de cada parte para garantizar una comunicación clara a lo largo de las cláusulas de encargo.
La nota de encargo de venta simple o encargo de venta debe contener una descripción precisa del bien que se va a vender. Esto incluye la dirección, la superficie, el tipo de propiedad (piso, casa, etc.) y sus características principales (número de habitaciones, equipamiento, etc.). Esta información es esencial para que los agentes inmobiliarios puedan promocionar la propiedad de forma eficaz.
Un encargo de venta simple se firma generalmente por un periodo fijo, a menudo entre 3 y 6 meses, con posibilidad de renovación tácita. Este periodo permite a las agencias tomar las medidas necesarias para encontrar un comprador, pero puede rescindirse más fácilmente que una nota de encargo de venta exclusiva si la persona desea cambiar de estrategia.
Los honorarios de los intermediarios se indican claramente en las cláusulas encargo. Suelen ser un porcentaje del precio final de venta y solo se pagan cuando se firma la escritura de compraventa. Sin embargo, si el propietario encuentra un comprador por su cuenta, no habrá que pagar ninguna comisión a los corredores.
Una de las principales características del encargo de venta inmobiliario simple es que el propietario puede vender la propiedad directamente sin tener que pagar un encargo de venta exclusivo a una agencia inmobiliaria. Todo esto es factible siempre que la propiedad no haya sido encontrada por uno de los profesionales. Esto aumenta las posibilidades del propietario de vender rápidamente.
Descubre las ventajas e inconvenientes que separan a agentes inmobiliarios y propietarios en un encargo de venta simple.
Puedes aceptar varias notas de encargo individuales, lo que aumenta tus posibilidades de cerrar varias ventas.
Para ayudarle a formalizar la venta de su propiedad, aquí tiene una plantilla de encargo de venta simple que puede personalizar para adaptarla a su situación. Esta plantilla está adaptada a las necesidades específicas del mercado inmobiliario español.
Un encargo de venta simple permite al propietario confiar la venta de su propiedad a varios agentes inmobiliarios, conservando al mismo tiempo la opción de venderla él mismo. Esto ofrece flexibilidad y puede aumentar la visibilidad de la propiedad en el mercado.
En una venta, el mandatario es la persona o entidad que recibe la nota de encargo de realizar una determinada gestión o transacción en nombre de otra persona. En el contexto inmobiliario, el mandatario es generalmente el agente inmobiliario o corredor, a quien el propietario (mandante) le ha dado el contrato de vender la propiedad en su nombre.
La duración de un encargo simple es generalmente de 3 meses, pero puede ser tácitamente renovable en virtud del contrato establecido entre el cliente y el agente inmobiliario.
Por lo general, la nota de encargo de venta simple lo redacta el agente inmobiliario, utilizando un formulario estándar preparado de conformidad con la legislación vigente. El documento debe ser claro y preciso para evitar cualquier malentendido entre el vendedor y la agencia, lo que genera una mayor confianza en el sector inmobiliario.
Una hoja de encargo inmobiliaria es un documento que formaliza las cláusulas del acuerdo entre el propietario de un inmueble y una agencia inmobiliaria para la gestión de la venta o alquiler de la propiedad. En este documento se detallan las condiciones del servicio, los honorarios, la duración del mandato de venta y los derechos del propietario, como la posibilidad de trabajar con varias agencias o vender por cuenta propia.
Las notas de encargo inmobiliarias son los detalles que se incluyen en un contrato de venta o alquiler, donde se especifican las condiciones pactadas entre el propietario y la agencia inmobiliaria. Estas notas suelen incluir información clave como el precio del inmueble, los plazos de venta o alquiler, los honorarios de la agencia y cualquier condición especial acordada entre las partes.