Las arras son una cantidad de dinero que se entrega por adelantado en una transacción de compraventa. Suele ser un porcentaje del precio total del inmueble y se entrega como señal de que ambas partes están comprometidas en mantener el acuerdo. El objetivo de las arras, también conocidas como garantía, es asegurar que tanto el comprador como el vendedor cumplan con su parte.
Además, es una forma muy utilizada de asegurar el precio de la propiedad. Si el comprador y el vendedor acuerdan un precio para la propiedad, las arras garantizarán que este no cambie durante el proceso de compraventa. De esta manera, el comprador puede estar tranquilo, ya que el precio acordado se mantendrá hasta la firma del contrato de compraventa.
Lectura recomendada: ¿Qué es el contrato de arras?
Estos son los tres tipos de arras que existen actualmente en España:
También conocida como “arras de desistimiento”. Este contrato permite a ambas partes desistir del contrato en cualquier momento antes de la firma del mismo. Si la parte que se arrepiente es el comprador, perderá el importe entregado como arras; si es el vendedor, deberá devolver el doble de dicha cantidad al comprador. En el contrato, es necesario hacer referencia al Artículo 1454 del Código Civil.
Una vez que se elige este tipo de garantía, ambas partes se comprometen a cumplir el contrato en su totalidad. En caso de violación, se aplica la regla general de incumplimiento de obligaciones, recogidas en el Artículo 1124 del Código Civil. En este caso, el perjudicado tiene derecho a reclamar el cumplimiento. Asimismo, también puede optar por solicitar una indemnización en el supuesto en el que la primera opción no fuera posible.
También conocidas como contrato de arras de garantía. Se utiliza para garantizar el cumplimiento del contrato ante cualquier escenario. Si la parte que no cumple es el comprador, perderá el importe entregado como garantía. Si es el vendedor, deberá devolver el doble de dicha cantidad al comprador. Además, en este tipo de arras, se establece una cláusula penal que obliga a la parte que incumpla a indemnizar a la otra por los daños y perjuicios causados. Este contrato se rige por el Artículo 1152 del Código Civil.
Existen diferentes medidas frente al incumplimiento de un contrato de arras, dependiendo de la tipología que se haya escogido:
Antes de firmar el contrato, es importante tener en cuenta el tipo de arras establecidas en dicho documento, para evitar así posibles inconvenientes en caso de incumplimiento.
Conceptos Jurídicos; Código Cívil 1454 https://www.conceptosjuridicos.com/codigo-civil-articulo-1454/
Conceptos jurídicos, Contrato de arras: https://www.conceptosjuridicos.com/contrato-de-arras/
Código Civil de España, actualización 1979https://www.boe.es/buscar/pdf/1889/BOE-A-1889-4763-consolidado.pdf
Si el vendedor finalmente decide no vender el inmueble, el comprador puede reclamar la devolución de las arras entregadas, además de una indemnización por los daños y perjuicios causados.
No es obligatorio hacer un contrato de arras en una compraventa inmobiliaria, pero es recomendable, ya que este documento establece las condiciones de la operación y garantiza los derechos y obligaciones de ambas partes.
La parte que vende, es decir, el propietario del inmueble, será quien se guardará el monto de las arras. Además, este importe ya sirve como una parte del pago.
Principalmente, el contrato de arras establece las condiciones y consecuencias de un posible incumplimiento del acuerdo, mientras que la señal o reserva es un anticipo de dinero que se entrega como muestra de interés en la compra, pero que no establece ningún tipo de obligación en caso de que la transacción no se lleve a cabo.
No, el IRPF se paga al vender la casa y será sobre el precio total de la venta. En este caso, el arras no afecta a este impuesto.