El precio de un terreno agrícola es un factor crucial para los agricultores, inversionistas y profesionales del sector. Estimar correctamente el valor de este tipo de parcelas es una gran ayuda para tomar decisiones informadas y rentables.
En este artículo, te explico los diferentes factores y métodos que se utilizan para estimar el precio de un terreno agrícola, incluyendo un ejemplo para que no te quede ni una sola duda.
Un terreno agrícola es una porción de tierra destinada a la producción de cultivos y actividades agrícolas o ganaderas. Es un espacio donde se pueden cultivar alimentos, o criar animales, realizar prácticas para obtener productos, etc.
Estos terrenos están diseñados y preparados para aprovechar al máximo los recursos naturales disponibles, como el suelo fértil, el agua y la luz solar. Los terrenos agrícolas pueden variar en tamaño. Desde pequeñas parcelas empleadas por agricultores familiares hasta grandes extensiones en las que operan las empresas agroindustriales. Una gestión adecuada de un terreno agrícola implica desde técnicas de cultivo, cuidado del suelo hasta el control de plagas para asegurar una producción eficiente y sostenible.
En España, la importancia de los terrenos agrícolas radica en su papel vital en la producción de alimentos y la seguridad alimentaria, así como en el apoyo a la economía local y regional.
En un terreno agrícola se pueden realizar diversas actividades relacionadas con la agricultura y la producción de alimentos. Algunas de las cosas que se pueden hacer en este tipo de terreno incluyen:
Estas son solo algunas de las actividades que se pueden llevar a cabo en un terreno agrícola. La elección dependerá de los recursos disponibles, las condiciones climáticas, el mercado local y los intereses del propietario del terreno.
También dependerá mucho de la Ley del Suelo y rehabilitación urbana, además de las legislaciones de cada comunidad autónoma.
En España, el precio de las tierras rurales se determina en función de varios parámetros:
Calidad del suelo: este es un factor muy importante a tener en cuenta si se destina el terreno a actividades agrícolas. Cuanta más calidad del mismo, mayor será el precio.
Existen varios métodos que generalmente se usan para estimar el precio de un terreno agrícola. Los más comunes en la actualidad son:
Lectura recomendada: ¿Cómo saber el valor de un terreno?
Actualmente, existen herramientas online que te permiten realizar estimaciones de todo tipo de propiedades y bienes inmuebles. En RealAdvisor puedes hacer una tasación de un terreno y conocer el precio estimado con solo un par de clics.
La herramienta diseñada por expertos en el sector utiliza una serie de factores y estadísticas actualizadas para poder proporcionar resultados fiables.
Debido a la complejidad de la tarea, puede ser útil y más eficaz contar con una estimación profesional. Esta opción tiene un coste adicional, ya que el experto acude al terreno en cuestión y evalúa su valor real en función de su estado y fertilidad. Además, verlo en persona le permitirá fijar un precio basado en el valor de rendimiento.
El valor de rendimiento agrícola corresponde al capital cuyos intereses (anualidad), calculados al tipo medio aplicable durante varios años, corresponden a los ingresos de una empresa o una propiedad agrícola explotada según las costumbres del país. Dado que el valor de rendimiento se calcula de manera uniforme en toda España, existe una directriz para estimarlo en el Real Decreto Legislativo 7/2015, de 30 de octubre.
Además de la venta, el alquiler de terrenos agrícolas es una opción muy común en el sector. Para estimar el precio de alquiler, se deben considerar factores similares a la estimación del precio de venta. Por ejemplo, la ubicación, la calidad del suelo, la demanda y las condiciones del mercado.
Existen métodos específicos para calcular el precio de alquiler, como el porcentaje del valor de mercado o el cálculo basado en la rentabilidad esperada. Si eliges esta opción, debes seguir las directrices establecidas en la Ley de Arrendamientos Rústicos.
La influencia de las características del suelo en el valor de un terreno agrícola puede ser significativa. Algunos de los factores a considerar incluyen la calidad y fertilidad del suelo, el drenaje, la topografía, la accesibilidad y la ubicación. Los suelos de alta calidad y fertilidad, con buen drenaje y ubicados en áreas accesibles, tienden a tener un mayor valor debido a su capacidad para producir cultivos de alta calidad. Además, la proximidad a infraestructuras y servicios agrícolas, como riego, transporte y mercados, también puede influir en el valor.
Las principales ventajas de invertir en terrenos agrícolas incluyen la posibilidad de obtener ingresos regulares a través del arrendamiento o cultivo propio, la diversificación de la cartera de inversiones, la protección contra la inflación y la demanda constante de alimentos. Sin embargo, también existen desventajas potenciales, como la dependencia de factores climáticos y agrícolas, los costes de mantenimiento y gestión de la tierra, y la falta de liquidez en comparación con otros activos.