Carmen es una agente inmobiliaria espectacular. La ayuda que me brindó durante la compra de mi vivienda fue más allá de simple gestión de papeleo. Mientras estaba en el proceso de compra intentaron okupar la vivienda y Carmen estuvo al pié del cañón gestionando que eso no fuese posible de ninguna manera. Los antiguos propietarios residían fuera de España por lo cual ella se tuvo que encargar de todo, y, pese al estrés y la tension, su buen humor y su sonrisa nunca desaparecían de su cara. Además, es una persona que si te tiene que decir algo que no te vaya a gustar, te lo dice. No es como tantos otros agentes a los que sólo les interesa vender y te regalan el odio. Por último, meses después de la compra me llegó un requerimiento de hacienda por un impuesto correspondiente a los antiguos propietarios, un trámite complejo y del que ni ella ni yo sabíamos nada, pero estuvo al pié del cañón facilitándome toda la información que le requería y me ayudó a que finalmente dicho impuesto fuese cubierto por quien debía abonarlo inicialmente. Recomendaría tratar con ella? Absolutamente. No podría haber encontrado un agente inmobiliario más confiable.